Así son las cosas, tenemos gente en los medios de comunicación que prácticamente chantajean para que los inviten a actividades que, consideran ellos, es imprescindible su presencia, cuando no necesariamente es así.
El bochinche que se ha armado es grande, especialmente en medios digitales, por el hecho de que Héctor Acosta (El Torito) no invitara a la reinauguración de su casa a algunos periodistas de su natal Bonao. Esto ha sido visto por comunicadores de esa ciudad como un pecado imperdonable, merecedor de la más dura condena, por lo que el intérprete merenguero-bachatero ha recidido por estos días los más ácidos y descarnados ataques. A lo que menos pudieran condenarlo es a la horca o a la crucifixión. Leer Mas..