LA HABANA. AP. El mortífero huracán Ike rugía ayer sobre el centro y oriente cubano, donde dejó cuatro muertos, destruyó viviendas, arrojó olas enormes y afectó cosechas, mientras que la capital se preparaba para el paso del fenómeno.
Las autoridades informaron ayer en la noche sobre el fallecimiento de cuatro personas e hicieron llegar las condolencias a sus familiares. Un par hombres en una localidad de la provincia de Villa Clara se electrocutaron cuando pretendían desmontar una antena del techo de su vivienda y esta se pegó al tendido eléctrico, mientras que otro hombre perdió la vida en Camagey debido a que un árbol cayó sobre su vivienda. Por último, una anciana quedó atrapada debajo de su casa en la provincia de Holguín.
Las muertes por ciclones en Cuba son muy inusuales debido a la extensa movilización popular y de la Defensa Civil. A lo largo de la isla 1,2 millones de personas habían sido protegidas o evacuadas, dijeron las autoridades, y los meteorólogos indicaron que el huracán podría dirigirse hacia La Habana en las próximas horas. LEER MAS...